Bultos en el cuello

Los bultos en el cuello son bastante comunes y pueden aparecer a cualquier edad, pero encontrar uno puede causarle bastante ansiedad.


Nuestra clínica de nódulos cervicales le ofrece una consulta única en la que podrá someterse a todas las pruebas que necesite para averiguar la causa de su nódulo cervical y qué hacer al respecto. Le haremos un historial y una exploración física, tras lo cual un radiólogo especializado evaluará el bulto de su cuello con una ecografía. Los resultados se le entregarán en la misma consulta. Hablaremos de su diagnóstico y plan de tratamiento. En algunos casos, es necesario organizar investigaciones complementarias que pueden tener lugar otro día.

Durante la consulta por un bulto en el cuello, el examen puede incluir uno o más de los siguientes aspectos:


Palpación del cuello - esta es la parte más importante de su examen. Palparemos su cuello y evaluaremos su nódulo cervical en cuanto a tamaño, aspecto, consistencia y localización, entre otros. Le palparemos el resto del cuello en busca de otras inflamaciones y evaluaremos los ganglios linfáticos, las glándulas salivales y el tiroides.

Inspección intraoral - se trata de un examen para evaluar la boca, la parte posterior de la boca y la lengua. A veces le examinaremos la lengua con un dedo enguantado para detectar posibles bultos, palpar la base de la lengua y evaluar las amígdalas. Cada uno de estos órganos puede estar relacionado con su bulto en el cuello. Este examen no siempre es necesario cuando se acude a nuestra clínica por un bulto en el cuello.

Endoscopia flexible - Consiste en introducir una pequeña cámara en la cavidad nasal para inspeccionar la parte posterior de la nariz, la garganta y la laringe. Cada uno de estos órganos puede estar relacionado con su bulto en el cuello. El endoscopio que utilizamos es un tubo fino y flexible con una diminuta cámara incorporada en la punta. Durante la exploración se le pedirá que emita determinados sonidos, lo que nos ayudará a evaluar mejor sus cuerdas vocales. La endoscopia flexible se realiza despierto, pero a petición suya se puede utilizar un anestésico local (insensibilizador) en aerosol. Este examen no siempre es necesario cuando se acude a nuestra clínica por un bulto en el cuello.

Ecografía del cuello - un radiólogo especializado le realizará una ecografía del cuello. Le pondrán un gel sobre la piel del cuello y le pasarán una sonda por la zona. Todas las estructuras de su cuello serán visibles en un monitor. Ese mismo día se le comunicarán los resultados de la ecografía.

Aspiración con aguja fina - En algunos casos, durante la ecografía, el radiólogo puede insertar una aguja fina en el bulto del cuello y aspirar una muestra de células para su posterior investigación. Un patólogo (médico que estudia los tejidos y fluidos corporales) estudiará las células al microscopio. Esto lleva algún tiempo, y se le comunicarán los resultados unas dos semanas después de la investigación.