Reflexiones longcovid desde la reumatología
En la primavera de 2020 tuve que cerrar mi consulta externa de Reumatología para acudir a la llamada de auxilio en el Hospital. Ante una crisis sanitaria sin precedentes, en mi vida de médico, tenía el deber profesional de ayudar todo lo posible ante el colapso del sistema y el sufrimiento de las personas. Durante 2 meses completos mi vida y mi actividad exclusiva se centró en ayudar al máximo número de pacientes que pudiera en el equipo 1 de contigencia de la covid19 del Centro Médico Teknon.
Durante esos dos meses ya me percaté de un hecho muy destacable, los pacientes que estabilizábamos y volvían a su casa estaban exhaustos, fatigados y debían de seguir guardando reposo. Su sistema inmunológico había luchado contra el virus, lo había conseguido vencer pero sus baterías se habían descargado. Del mismo modo que ocurre con los móviles cuando no tienen batería, que no pueden enviar una foto, hacer una videollamada o cargar un mensaje, el sistema de baterías de estos pacientes había entrado en reserva y estaba descargado.
Cuando pasado dos meses pude reabrir mi despacho y atender de nuevo presencialmente a mis pacientes, empecé a darme cuenta de que no sólo los pacientes que habían estado ingresados se habían quedado sin baterías, sinó que también les ocurría lo mismo a aquellos que habían pasado la covid19 en sus casas confinados.
Empecé a investigar la literatura científica y a compartir mis observaciones clínicas con otros compañeros reumatólogos de diversos hospitales y todos observaban el mismo hecho, la covid19 sensibilizaba el sistema de percepción del dolor tanto a nivel periférico como a nivel central y ocasionaba síntomas muy diversos más allá del pulmonar. Me refiero sobretodo al cansancio, la fatiga extrema, el dolor múscular y el dolor articular. Muchos pacientes me lo siguen describiendo hoy en día como: «una apisonadora me ha hubiera pasado por encima» » estoy molida, me duele todo y no me puedo ni levantar de la cama».
Ante esta realidad clínica, durante este último año he atendido a muchos más pacientes y me he percatado que realmente no experimentan nada nuevo que no hubiera visto antes en otras enfermedades, en concreto en los sindromes de sensibilización central como la fibromialgia y la fatiga crónica.
Mi percepción y opinion como especialista en Reumatología y Doctorado en Medicina Interna, concretamente en el estudio de las enfermedades inflamatorias y autoinmunes, es que la covid19 actúa como un trigger, un desencadenante, genera un estrés en el sistema inmunitario de la persona infectada. En aquellas personas que su sistema no consigue adaptarse correctamente y defenderse lo que ocurre es que descarga su sistema endorfínico vital, su batería, y ademas se sensibiliza al dolor y a otros estímulos, como si padeciera un cuadro de crisis de fibromialgia o síndrome de fatiga crónica.
Nuestro esfuerzo y trabajo se basa en ayudar a estos pacientes a recargar sus baterías y desensibilizar su sistema nervioso hasta que tengamos un tratamiento definitivo curativo. Hoy por hoy utilizamos todas las herramientas con un enfoque multidisciplinar que están a nuestro alcance: un buen plan nutricional, un cronograma individualizado de actividad física progresiva, la fisioterapia personalizada, el apoyo psicológico, las técnicas de neuromodulación y los tratamientos con Acupuntura médica.
Dr. Juan Muñoz Ortego
Reumatología y Doctorado en Medicina Interna
Director Médico instituteMYM
Unidad de Sindromes de Sensibilizacion Central en Centro Médico Teknon