Unitat d'Al.lèrgia Alfons Malet
Para valorar la inmunidad humoral se determinan las inmunoglobulinas humorales.
Para estudiar la probabilidad de la sensibilización se realiza la inmunoglobulina IgE total en suero.
Para determinar el alérgeno responsable, se valoran siempre los niveles de los anticuerpos específicos en la sangre, mediante técnicas de IgE específicas y actualmente con el apoyo del diagnóstico molecular. Se pueden determinar alérgenos nativos purificados y alérgenos recombinantes (ingeniería genética).
Para los episodios agudos, severos de algunas patologías alérgicas es necesario determinar mediadores inflamatorios, en la sangre, como la histamina plasmática, la triptasa sérica y en la orina como la metilhistamina, para sospechas de patologías como la anafilaxia y la mastocitosis sistémica.
En patologías cutáneas alérgicas, en ocasiones es necesario realizar biopsias cutáneas y se determina con el estudio del infiltrado celular, la detección de marcadores celulares específicos en la piel afectada.
Para estudios de patologías más complejas se pueden realizar excepcionalmente técnicas más sofisticadas como la inmunotransferencia de proteínas (Immunobloting), que es útil para identificar proteínas de extractos alergénicos, reconocidas por la IgE del paciente, y tests celulares como el test de liberación de histamina y los tests basados en la citometría de flujo (TAB y TTL).
TRATAMIENTO
1. INMUNOTERAPIA
El único tratamiento que puede alterar la historia natural de la enfermedad alérgica es la INMUNOTERPIA ALERGENO ESPECÍFICA.
Consiste en la administración repetida del alérgeno específico con una pauta mensual que permite tolerar la dosis máxima eficaz con el objetivo de proporcionar un incremento de la tolerancia inmunológica alergénica con la consiguiente mejoría clínica.
2. FÁRMACOS BIOLÓGICOS
Son fármacos con anticuerpos monoclonales que realizados de forma continuada son mútiles en algunas patologías graves como el asma bronquial grave, la urticaria crónica y la dermatitis atópica severa.