Síndrome del intestino irritable y celiaquía. ¿Qué relación tienen?
Se calcula que entre el 2,3 y el 12% de la población padece síndrome del intestino irritable; mientras que la enfermedad celíaca afectaría al 1%, según la Federación de Celíacos de España (FACE).
El SII es un trastorno funcional digestivo -es decir, sin causa orgánica ni bioquímica claramente conocida- que se caracteriza clínicamente por la asociación de dolor/molestia abdominal y alteraciones en el hábito deposicional. Es la causa más habitual de consulta al médico de cabecera por dolor intestinal, y el diagnóstico más habitual en pacientes enviados al gastroenterólogo.
Quienes lo sufren ven muy afectada su calidad de vida, ya que a veces les impide acudir a eventos sociales, salir por trabajo o viajar.
La enfermedad celíaca (EC) o celiaquía es una enfermedad inflamatoria crónica del intestino delgado que se caracteriza por una respuesta inmunológica alterada al gluten de la dieta, contenido cereales y sus derivados, que se desarrolla en personas genéticamente predispuestas. Los daños pueden ser desde leves a una destrucción importante de la mucosa intestinal; pero son reversibles cuando se elimina el gluten de la dieta. Sin embargo, las alteraciones vuelven a aparecer si la persona vuelve a ingerir gluten.
Relación entre síndrome del intestino irritable y enfermedad celíaca
Durante muchos años se ha considerado que el SII y la EC eran dos entidades completamente diferentes: la segunda relacionada con una intolerancia a la ingesta de gluten y la primera sin ninguna relación con este. Sin embargo, durante la última década diversos estudios han comprobado que esta separación no es tan clara. Puede haber pacientes que habiendo sido diagnosticados de SII en realidad sufren una EC. Aún más, parece existir un grupo de enfermos que sin tener una EC padecen una sensibilidad al gluten con manifestaciones digestivas semejantes al SII.
Los síntomas del SII y la EC pueden ser indistinguibles, en especial cuando predominan la diarrea, la hinchazón o el dolor abdominal. La enfermedad celíaca puede producir dolor abdominal (77%), hinchazón (73%), diarrea (52%), estreñimiento (7%) o un patrón alternante (diarrea/estreñimiento) en las deposiciones (24%), todos ellos síntomas considerados en el diagnóstico de SII.
Esta coincidencia de síntomas explica, al menos en parte, que el tiempo medio hasta el diagnóstico de EC sea de 12 meses, y que en más del 20% de los casos transcurran 10 años antes de establecer la sospecha diagnóstica y realizar las pruebas necesarias.
El diagnóstico
La enfermedad celíaca es más fácil de diagnosticar, con pruebas serológicas y, en caso positivo, biopsia duodenal en pacientes con SII que no padezcan estreñimiento. La historia clínica proporciona, también, información de gran valor.
Descartada la celiaquía, hay que centrarse en el SII, que solo puede detectarse por sus síntomas y la exclusión de otras enfermedades similares.