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Actividades extraescolares. ¡Reflexionemos!

La vuelta al cole ya está aquí y con ella la organización de horarios y calendario. Además de con deberes, las agendas se llenan de actividades extraescolares: inglés, ballet, basquet, fútbol…un sinfín de posibilidades para nuestros hijos

Hemos preguntado al Dr. Jordi Sassot qué papel juegan las extraescolares en la educación de de los niños y niñas, cómo planificarlas y cómo les puede afectar un horario repleto de obligaciones.

Actividades extraescolaresActividades extraescolares

¿Es excesiva la agenda de los niños y niñas?

Probablemente sí, las causas no hay que buscarlas en la educación de los padres, sino en uno de los aspectos que más agobian a las familias, los deberes o tareas extraescolares que nacen de la propia escuela. Son en la mayoría de los casos excesivas y si, además, nos fijamos en sus contenidos, son totalmente anodinas y carentes de creatividad. Creo que es útil pedir una cierta responsabilidad en los niños y que puedan tener algunas pequeñas obligaciones relacionadas con la escuela, pero que no les impida tener su propio tiempo al margen del colegio.

Se tiene que acabar con esta extraña historia de que tienen que acabar en casa lo que no han hecho en la escuela, por la misma razón en el colegio les tendrían que enseñar a comer o a vestirse.

Hay que acabar con el mito de que un colegio que no pone deberes no es un buen colegio

Hoy en día aún perdura el mito de que un colegio que no pone deberes no es un buen colegio. Es tan absurdo esto como lo que hacen algunas familias de realizar múltiples actividades laborales en los momentos de convivencia familiar. Los llamados padres " laboritis", en los que en su jerarquía de valores lo principal es su actividad profesional.

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El tiempo de convivencia familiar es fundamental

Estamos de acuerdo en que el tiempo de convivencia familiar es fundamental, ¿cómo podemos educar si no convivimos, sino pasamos ratos juntos simplemente jugando con nuestros hijos? Éste es un punto de salida importante al hablar de actividades extraescolares. También tiene que quedar claro que los deberes no lo son, y yo añadiría de que tampoco las pueden impedir. Tendría que poder ser normal poner una nota en la Agenda Escolar que dijera: " Pau no ha tenido tiempo de acabar los deberes porqué tenía algo mas importante que hacer, jugar conmigo o ir a su " esplai " donde está aprendiendo a ser empático y asertivo con sus amigos del barrio ".

Socializar es importante

El tema social es uno de los aspectos más importantes en las actividades extraescolares. Aunque muchas de ellas son escolares, es muy útil para el aprendizaje de unas adecuadas habilidades sociales que los niños y niñas las puedan realizar, al menos en parte, al margen de sus amigos de la escuela, es decir mejor fuera de su entorno escolar. ¿Por qué?, pueden tener más experiencias en ambientes sociales distintos, con lo que se enriquece su asertividad y empatía.

¿Que otros aspectos pueden justificar las actividades extraescolares?

Hay una variable básica en educación que es el desarrollo de la creatividad. El mundo de la expresión emocional a través del arte o a través del movimiento ayudan a crecer a nuestra población infantil tan arraigada al mundo virtual. Y el deporte, fundamental por su cultura del esfuerzo y labor equipo, evitando, muy importante, los altos niveles de competitividad que fácilmente nos conducen al absurdo.

Mal vamos si la actividad es sólo para conciliar el horario familiar, es comprensible y podrá ser necesario por múltiples motivos, pero nunca será un objetivo educativo ya que en estos casos los niños acaban haciendo lo que por horario va mejor a los padres.

¿Perder el tiempo?

Y sobre todo, dar tiempo para "perder el tiempo", dejando al libre albedrío infantil las decisiones. Qué gran absurda esta idea de " siempre aprovechar el tiempo". No olviden que la creatividad muchas veces nace el vacío, son pequeños momentos de desconexión que nuestro cerebro necesita. Mejor dicho, de nuestro cerebro ya no, que ya es un cerebro añoso, pero si en un cerebro en desarrollo, abierto a múltiples nuevas sinapsis.

Es posible todo esto, creo que sí, pero siempre fruto de una adecuada toma de decisiones por parte de los padres, decisiones flexibles y con capacidad adaptativa ya que van a ser muchas las eventualidades y nunca podremos anticipar todas las variables.


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