Láser

El láser en dermatología: tratamientos

Actualmente la dermatología cuenta con diversos sistemas de láser que permiten tratar un sinfín de enfermedades y condiciones cutáneas que hasta hace poco tiempo contaban con pocos o ningún tratamiento.

Existen diferentes tipos de láser selectivo para diferentes tratamientos (cutáneo, depilación, verrugas, etc.).

Depilación láser

La depilación mediante láser ha recibido mucha atención en nuestra especialidad. Actualmente contamos con distintos sistemas de láser y luz pulsada que permiten la eliminación de pelo no deseado, bien por razones médicas (hirsutismo debido a alteración hormonal) o cosméticas.

Tatuajes

Es posible eliminar los tatuajes, algunos con mejor resultado que otros. Los tatuajes negros responden muy bien al láser Q-Switched de Alejandrita, Erbio y Nd:Yag.

En otros colores de uso frecuente como el rojo se requerirá un láser de longitud de onda más corta. Por lo tanto, deberemos utilizar más de un láser para la eliminación de los tatuajes de más de un color.

Para eliminar un tatuaje se requieren varias sesiones de tratamiento.

Lesiones vasculares

Las lesiones vasculares pueden tratarse con distintos sistemas de láser, según la profundidad y calibre de los vasos así como del color de la lesión. Entre ellos podemos citar el láser pulsado de colorante, neodimio:yag de pulso largo, kriptón, vapor de cobre, KTP y diodo de pulso largo. Más recientemente, se ha introducido la luz pulsada intensa.

Lesiones pigmentadas

Las lesiones pigmentadas melanocitarias (léntigos, nevos melanocíticos adquiridos y congénitos, nevo de Ota, nevo Spilus, etc) y no melanocitarias (tatuajes) pueden ser tratadas con sistemas de láser de pulso muy corto, conocidos como sistemas Q-switch, entre los que contamos con el láser de alejandrita, rubí y neodimio:yag. Asimismo, las lámparas de luz pulsada pueden emplearse en el tratamiento de las lesiones melanocitarias superficiales, como los léntigos solares o seniles y lentígines.

Verrugas

Las verrugas víricas o verrugas comunes son pequeñas excrecencias ásperas del color de la piel o ligeramente marrones causadas por la infección vírica de las células de la epidermis –parte más superficial de la piel- por el virus del papiloma humano. Las verrugas pueden infectar cualquier parte de la piel pero son más comunes en las manos y pies. El tratamiento incluye diversos métodos como nitrógeno líquido, cáusticos (ácido salicílico), imiquimod, interferón, 5-fluoracilo, bleomicina y láser.