Castro Domínguez Francisco
La espondilolistesis lumbar es una afección en la que una vértebra de la columna lumbar (inferior) se desliza hacia adelante sobre la vértebra que se encuentra debajo. Este desplazamiento puede producirse por diversos motivos, y se clasifica en función del grado de deslizamiento. El término "espondilolistesis" se deriva de las palabras griegas "spondylos", que significa columna vertebral, y "listhesis", que significa resbalar o deslizarse.
Los puntos clave sobre la espondilolistesis lumbar incluyen:
Clasificación:
La gravedad de la espondilolistesis suele clasificarse en grados:
Grado I: 0-25% de deslizamiento.
Grado II: 25-50%.
Grado III: 50-75%.
Grado IV: 75-100%.
Grado V: Más del 100% (también llamado espondiloptosis).
Causas:
- Espondilolistesis degenerativa: asociada con el envejecimiento y cambios degenerativos en la columna, como degeneración del disco y artritis.
- Espondilolistesis ístmica: causada por un defecto o fractura por estrés en una parte de la vértebra llamada istmo. Esto puede ser congénito o desarrollarse con el tiempo, particularmente en atletas que realizan actividades que implican hiperextensión de la columna.
Síntomas:
La gravedad de los síntomas puede variar. Algunas personas con espondilolistesis pueden ser asintomáticas, mientras que otras pueden experimentar dolor lumbar, rigidez y, en casos más graves, síntomas relacionados con la compresión nerviosa, como dolor en las piernas (ciática) o debilidad.
Diagnóstico:
El diagnóstico implica una evaluación clínica exhaustiva, que incluye una revisión de los síntomas y el historial médico, así como estudios de imágenes como radiografías, resonancias magnéticas o tomografías computarizadas para evaluar el grado de deslizamiento e identificar cualquier compresión nerviosa asociada.
Tratamiento:
Las opciones de tratamiento dependen de la gravedad de la afección y la presencia de síntomas.
Enfoques conservadores: los casos leves a moderados se pueden tratar de manera conservadora con reposo, fisioterapia, analgésicos y el uso de aparatos ortopédicos para estabilizar la columna.
Intervención quirúrgica: los casos graves o aquellos que causan síntomas neurológicos pueden requerir intervención quirúrgica. La cirugía tiene como objetivo estabilizar la columna, descomprimir los nervios y restaurar la alineación.
Prevención:
Si bien algunas formas de espondilolistesis son congénitas y no se pueden prevenir, puede ser beneficioso mantener una buena postura, hacer ejercicio regularmente para fortalecer los músculos centrales y de la espalda y evitar actividades que puedan contribuir a una tensión excesiva en la columna.
El tratamiento de la espondilolistesis lumbar es individualizado y, a menudo, implica un enfoque colaborativo entre profesionales de la salud.
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