Castro Domínguez Francisco
La tendinitis rotuliana, también conocida como tendinopatía rotuliana o "rodilla del saltador", es una lesión común que afecta al tendón que conecta la rótula (patela) con la tibia.
Etiología:
La tendinitis rotuliana generalmente se desarrolla debido a la sobrecarga repetitiva del tendón rotuliano. Las actividades que involucran saltos frecuentes, como el baloncesto, el voleibol y el atletismo, pueden aumentar el riesgo de desarrollar esta condición. La tendinitis rotuliana también puede ocurrir como resultado de:
- Sobrecarga crónica: Participación en actividades que ejercen una tensión excesiva sobre el tendón rotuliano, como correr, saltar, subir escaleras o agacharse repetidamente.
- Mal alineamiento biomecánico: Factores como la alineación incorrecta de la pierna, los pies planos o los arcos altos pueden aumentar la tensión en el tendón rotuliano.
- Debilidad muscular: La falta de fuerza o flexibilidad en los músculos de la pierna, especialmente los músculos cuádriceps y los músculos de la cadera, puede contribuir a la sobrecarga del tendón rotuliano.
Causas:
Las causas específicas de la tendinitis rotuliana pueden incluir:
- Sobrecarga aguda o crónica del tendón debido a actividades deportivas o laborales.
- Lesiones directas en la rodilla.
- Cambios repentinos en la intensidad o el volumen del entrenamiento.
- Factores anatómicos, como la forma de la rótula o la alineación de las piernas.
- Calzado inadecuado o superficies de entrenamiento.
Tratamiento:
El tratamiento de la tendinitis rotuliana suele ser conservador y puede incluir:
- Reposo y actividad modificada: Evitar actividades que aumenten el dolor y la inflamación en la rodilla, como correr o saltar, y optar por actividades de bajo impacto, como nadar o andar en bicicleta.
- Terapia física: Ejercicios de fortalecimiento y estiramiento para mejorar la flexibilidad y la fuerza de los músculos de la pierna, especialmente los cuádriceps y los músculos de la cadera. La terapia física también puede incluir técnicas como la terapia de ultrasonido o el masaje para ayudar a reducir la inflamación y promover la curación del tendón.
- Aplicación de frío y calor: Aplicar hielo en la rodilla durante 15-20 minutos varias veces al día para reducir la inflamación y el dolor. El calor puede ayudar a relajar los músculos antes de realizar ejercicios de estiramiento.
- Medicamentos antiinflamatorios: El uso de medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINEs), como ibuprofeno o naproxeno, puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación en la rodilla.
- Soporte y protección: El uso de ortesis o vendajes puede proporcionar soporte adicional a la rodilla y ayudar a reducir la carga sobre el tendón rotuliano durante la actividad física.
En casos graves o persistentes de tendinitis rotuliana que no responden al tratamiento conservador, puede ser necesario considerar opciones más avanzadas, como la inyección de corticosteroides, plasma rico en plaquetas, la terapia de ondas de choque extracorpóreas o, en casos excepcionales, la cirugía para reparar el tendón dañado.
Mañana | Tarde | |
---|---|---|
Lunes | 09:00 - 14:00 h | 14:30 - 19:00 h |
Martes | 09:00 - 14:00 h | 14:30 - 19:00 h |
Miércoles | 09:00 - 14:00 h | 14:30 - 19:00 h |
Jueves | 09:00 - 14:00 h | 14:30 - 19:00 h |
Viernes | 09:00 - 14:00 h | 14:30 - 19:00 h |